La propuesta incorpora al tejido urbano más de 6 hectáreas de superficie de ciclovías, corredores aeróbicos y peatonales; áreas de servicio y zonas de integración; además de espacios con negocios gastronómicos, comerciales y de entretenimiento. Recorre la traza debajo de las vías del ferrocarril Mitre, desde Avenida Dorrego hasta el cruce con Avenida Monroe.
Los trabajos avanzan de manera sostenida; ya se inauguraron los sectores bajo la estación Belgrano C y se prevé la apertura del sector Barrio Chino en diciembre. Progresivamente, durante 2023, lo harán los tramos restantes (Del Libertador, Estación Lisandro de la Torre e Hipódromo).
En la etapa llamada Estación Belgrano, a la altura de Avenida Juramento, Echeverría y Sucre, ya se entregaron a los inquilinos unos 2.200 m2 de locales y sus expansiones. Además, ya hay 9 espacios en funcionamiento y se realizaron intervenciones en el espacio público del pasaje, con apertura de canteros, entre otros trabajos.
En la etapa Barrio Chino, entre Juramento (primer sector) y la calle Mendoza (segundo sector), se hicieron 5.000 m2 de locales, expansiones y espacio público y se firmaron 28 contratos de alquiler.
En la etapa Libertador, desde La Pampa y hasta la estación Lisandro de la Torre, este mes empezaron las obras y la comercialización de sectores. Allí habrá servicios generales, gastronomía y automotrices. Y falta arrancar la etapa Hipódromo, entre Olleros y casi Avenida Dorrego, donde habrá bares, gastronomía, áreas para eventos y oficinas, entre otros rubros.
La eliminación de 8 cruces a nivel y la apertura de 4 nuevas calles se aseguró la fluidez del tránsito, cooperando con la movilidad del barrio y el cuidado del medio ambiente. También, junto con las obras de elevación, se incorporaron espacios verdes en la intersección de Virrey del Pino y la Vía. Los vecinos lo llaman downline (línea descendente) y propicia la integración de un área del Bajo Belgrano que históricamente se encontraba aislada. Todo el entorno de la Estación Belgrano C fue integrado paisajísticamente ordenando el centro de transbordo a cielo abierto de dicho sector.
La transformación más emblemática al momento es la del pasaje Echeverría (detrás de la estación Belgrano C) que antiguamente conformaban un espacio oculto y degradado con usos residuales y comercios de baja calidad. Con la reconversión del entorno de estación y aperturas de calle los usos comerciales se transformaron positivamente consolidándose como un corredor gastronómico de vida propia con fuerte impronta cultural, en el que convergen cientos de visitantes.