Gracias a un problema tecnológico el ciudadano no recibirá transitoriamente otro golpe letal al bolsillo
Debido a un problema con los molinetes, SBASE no podrá cobrar íntegramente el último incremento tarifario que se implementará a partir del próximo 1° de agosto. Después de una prolongada lucha legal para incrementar el precio del subte, el gobierno de la ciudad de Buenos Aires perdió la contienda contra la tecnología y no podrá aplicar el aumento por una razón insólita.
Debido a un problema técnico, es necesario modificar todos los molinetes de la red, y en el gobierno porteño piensan que no podrán completar los cambios antes de que finalice julio. Un problema con el hardware limita el precio que pueden cobrar por el boleto. Con la tarifa actual no hay inconvenientes, pero el próximo aumento no pasa el filtro. «Es difícil de entender, pero el problema es con el hardware, no con el software», explicaron.
Cuando se reemplazaron todos los molinetes para utilizar la tarjeta Subtepass, el boleto costaba 70 centavos. Ese precio se ha multiplicado casi mil veces y el sistema no soportará el próximo incremento. El 1° de junio, la tarifa aumentó a $650 después de que la cámara de apelaciones aceptara una solicitud del gobierno para suspender una medida cautelar dispuesta por Elena Liberatori. En agosto, el precio del viaje debería subir a $757, casi el doble que el costo de los colectivos que recorren el área metropolitana.