Sistemas automatizados y cobro digital serán las únicas alternativas en caminos urbanos e ingresos a la ciudad desde 2026
A partir del 1 de enero de 2026, el sistema de peajes en las autopistas de la Ciudad de Buenos Aires y sus principales accesos dejará de aceptar pagos en efectivo. La nueva modalidad será completamente digital y se aplicará a todos los vehículos que circulen por estos corredores, incluyendo automóviles particulares, motocicletas y unidades de transporte urbano e interurbano.
La decisión busca agilizar la circulación, reducir los tiempos de espera en las estaciones de peaje y minimizar los errores en el cobro. El proceso de transformación comenzó en 2025, con la instalación de sistemas automáticos de lectura de patentes y la expansión del sistema TelePASE, ya utilizado por más del 90% de los conductores habituales.
El sistema se basa en la identificación automática del vehículo por patente y el cobro a través de cuentas registradas, ya sea mediante TelePASE o plataformas compatibles. Las cabinas tradicionales serán reemplazadas por pórticos con cámaras y sensores que permiten el cobro sin necesidad de detener el vehículo.
Los conductores deberán tener su vehículo registrado en el sistema. Esto se puede hacer a través de la web oficial, aplicaciones móviles o puntos de inscripción ubicados en accesos estratégicos. El registro vincula la patente con un medio de pago electrónico (cuenta bancaria o tarjeta de crédito), permitiendo el débito automático al pasar por los peajes.
El paso por una estación sin tener el vehículo registrado o sin completar el pago dentro del plazo estipulado generará una multa automática, cuyo valor supera los $100.000. Esta penalización busca incentivar la adhesión al sistema digital y evitar transgresiones. No se contemplan excepciones para conductores ocasionales o turistas.
La medida abarca las principales autopistas y accesos a la Ciudad de Buenos Aires, incluyendo los corredores desde el sur (Ezeiza y Riccheri), el norte (Lugones y Panamericana) y el oeste (Acceso Oeste y General Paz). Desde julio de 2025, se implementó un formato de peaje sin barreras en algunos cruces, eliminando cabinas físicas y permitiendo el paso continuo.
Este modelo ya había sido adoptado en rutas de otros países y demostró mejoras en el flujo vehicular, especialmente en horarios pico. El sistema almacena los datos de cada paso, permitiendo a los usuarios consultar su historial, abonar deudas y realizar reclamos por eventuales errores.
El nuevo sistema también prevé opciones para usuarios ocasionales. Quienes visiten la ciudad desde el interior del país o desde el exterior podrán registrar su vehículo de forma temporal y habilitar un método de pago electrónico, sin necesidad de contar con efectivo.
Las autoridades responsables informaron que el sistema digital cumple con protocolos de seguridad bancaria y garantiza la protección de los datos personales. La información es cruzada con bases oficiales y las operaciones se realizan en entornos seguros.
Durante la transición, algunos usuarios reportaron dificultades en el registro o errores en el cobro. Los organismos viales indicaron que están reforzando los canales de atención al público, y se habilitaron líneas especiales para consultas y reclamos. Además, se continuará difundiendo material explicativo en distintos canales para facilitar la adaptación de quienes aún no están adheridos al sistema digital.
El retiro total del efectivo en peajes forma parte de un plan integral de modernización del transporte urbano y posiciona a la Ciudad de Buenos Aires como una de las primeras en la región en implementar un sistema completamente automatizado. Se espera que el modelo sirva de referencia para otras jurisdicciones que aún utilizan métodos manuales o mixtos de cobro.